El deterioro cognitivo es una condición que afecta a la memoria, el pensamiento y la capacidad para tomar decisiones y puede presentarse de muchas formas, desde el deterioro cognitivo leve hasta enfermedades más graves como el alzhéimer.
Para las personas que se enfrentan a estos desafíos, la declaración de voluntades anticipadas se ha convertido en una herramienta fundamental para asegurarnos que su voz será escuchada.
¿Qué es una Declaración de Voluntades Anticipadas?
Es un documento legal mediante el cual una persona expresa, de manera anticipada, sus deseos e instrucciones previas sobre los cuidados médicos y tratamientos que desea recibir o rechazar en caso de que, en el futuro, no sea capaz de comunicar sus decisiones de una manera consciente y autónoma debido a una enfermedad, accidente o cualquier otra circunstancia que afecte a su capacidad de tomar decisiones.
La DVA permite establecer preferencias respecto a aspectos como tratamientos invasivos, la administración de cuidados paliativos, la reanimación en caso de parada cardiorrespiratoria, la alimentación e hidratación artificial entre otros.
Además, puede incluir la designación de un representante de decisiones médicas, alguien en quien la persona confía para actuar en su nombre y asegurarse de que se cumplan sus deseos.
¿Qué Debe Incluir una Declaración de Voluntades Anticipadas?
Identificación del documento y la persona
- Designación de un representante de decisiones de salud dándole instrucciones y orientación de como debe actuar incluyendo responsabilidades y límites de su autoridad.
Instrucciones sobre tratamientos médicos específicos:
Son instrucciones claras sobre los tratamientos médicos que se desean recibir y cuales no
Reanimación Cardiopulmonar deseo o rechazo al mismo
Ventilación Mecánica
Alimentación e Hidratación Artificial
Diálisis
Transfusiones de sangre
Tratamientos experimentales
- Instrucciones sobre cuidados paliativos y manejo del dolor
- Donación de órganos y tejidos.
- Instrucciones sobre el lugar del cuidado
- Directrices sobre temas espirituales o religiosos
- Declaración de validez legal
Firma y fecha del documento
Firma de dos testigos independientes que no sean familiares directos o beneficiarios de herencia.
Firma del notario
¿Cómo Redactar una Declaración de Voluntades Anticipadas?
- El primer paso es reflexionar sobre las propia creencias, valores y deseos en relación con la atención médica y los cuidados al final de la vida.
Pregúntate:
¿Qué significa para mi una buena calidad de vida?
¿Prefiero recibir cuidados agresivos que prolonguen la vida o cuidados que prioricen el confort y la calidad de vida, aunque acorten la duración de esta?
¿Como manejo el dolor de una enfermedad irreversible?
- Consulta con profesionales de la salud
Habla con médicos, especialistas en geriatría o neurología, enfermeras y otros profesionales de la salud que conozcan tu condición médica. Ellos pueden ofrecer información detallada sobre las diferentes opciones de tratamiento y su implicación a corto y largo plazo.
Entiende las opciones de tratamiento disponibles, sus beneficios, riesgos y como pueden afectar tu calidad de vida y pregunta sobre el pronóstico ya que ayuda a tomar decisiones más informadas.
- Involucra a tus seres queridos
Habla con la familia, amigos cercanos o cuidadores sobre tus deseos. Asegúrate de que comprendan tus decisiones y estén dispuestos a respetarlas. Estas conversaciones también pueden ayudar a evitar conflictos o malentendidos en el futuro.
- Consulta a un abogado especializado
Aunque no es obligatorio, el abogado puede ayudarte a redactar una DVA clara y conforme a las leyes locales, y también puede aconsejarte sobre otros documentos legales relevantes, como el poder notarial para asuntos de salud.
En conclusión, una DVA es una forma de asegurarte de tus deseos se respetan en el futuro. A través de una planificación cuidadosa y un diálogo abierto con tus seres queridos y profesionales de la salud, puedes garantizar que tu voz sea escuchada, incluso cuando ya no puedas expresarte por ti mismo.